BARTOLOMÉ FERRER PERTUSA
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D. Bartolomé Ferrer Pertusa nació en Salinas del Manzano en el año 1.695. Hijo ilustre de esta localidad en las tierras del Marquesado de Moya, ell presbítero Ferrer es un caso paradigmático de cura rural ilustrado, a caballo entre los siglos XVII y XVIII que participa de las ideas científicas y pedagógicas que marcaron el floreciente reinado de Carlos III. Destacó en la arquitectura, las matemáticas, la ingeniería y la cartografía, conociendo también recursos de hidraúlica. En buena medida Ferrer es un antecedente de la ilustración española que, al parecer tuvo bastante ionfluencia entre el clero rural conquense como se puede apreciar en las respuestas al interrogatorio del geógrafo real Tomás López. Sería de justicia estudiar la influencia que la iglesia conquense tuvo en el siglo XVIII como divulgadora de la ilustración bajo el prisma del catolicismo lejos de oscurantsimo y cerrammiento a las ideas científicas que se ha querido dar. |
De sus escasas noticias biográficas sabemos que era licenciado y cura de la Parroquia de Olmeda de la Cuesta y de sus anejos Villarejo del Espartal y Fuentes Buenas, cargo que ejerció entre 1.687 y 1725. Estuvo varios años provisionalmente en Madrid con un empleo, estancia que aprovechó para asistir a algunas clases en los Reales Estudios de la Compañía de Jesús convertidas en Instituto San Isidro en 1845, donde conocería al padre Bartolomé Alcázar a quien el Obispo de Cuenca D. Antonio Alonso San Martín había confiado escribir una biografía de San Julián. Tanto el Obispo SanMartín como el P. Alcázar debían conocer las habilidades matemáticas, geográficas y artísticas del presbítero de La Olmeda par incluir el mapa de éste en la citada obra. |
Que el presbítero Ferrer no era un vulgar cura rural da idea el hecho de que Tomás López tuviera entre los volúmenes de su biblioteca el titulado Vida, virtudes y milagros de San Julián, escrito por el P. Bartolomé Alcázar y publicado en Madrid en el año 1692. No pensamos que fuera la vida de nuestro Santo Patrón quien llamara la atención del real geógrafo, más bien creemos que el objeto de su interés era el mapa que figura al final de la obra, realizado por Ferrer y grabado en Madrid por Fesman y Medina. |
Confiesa que tuvo como profesores en los Reales Estudios a los jesuitas Kresa y Pettrey. Manuel Jacobo Kresa era natural de Moravia y vino a España para hacerse cargo de la cátedra de Matemáticas entre 1.690 y 1.696. Por su parte Francisco Pettrey, de origen borgoñés fue profesor en el mismo centro de Gramática, Retórica, Erudición y Matemáticas entre 1.675 y 1.693. Teniendo en cuenta las fechas del profesorado de Pettrey y Kresa así como el año de la impresión de la vida de SanJulián, Ferrer Pertusa debió estar en Madrid entre los años 1.690 y 1.696. |
En 1716 regaló una copia de su manuscrito “ El buen Zelo” al Cabildo de la catedral de Cuenca, organismo con el cual estaba muy vinculado. |
Sólo ha llegado hasta nosostros una obra de Bartolomé Ferrer titulada ”Curiosidades útiles .Arithmética, Geometría y Archotectónica .O sea la regla de oro Arithmética. El buen Zelo, tratado geométrico. Y el curioso architecto o Cartilla de Architectura” 719 impresa en Madrid por Eusebio Huerta en 1.719, lo que permite suponer que es una obra de plena madurez intelectual del autor. Aunque por su condición sacerdotal debía poseer una sólida formación teológica y humanística se aprecia en él una clara inclinación por las ciencias aplicadas al servicio del hombre pues a esta su primera obra añade la intención de publicar un tratado de relojes astronómicos con unos principios de los círculos de la esfera, las zonas, los climas y otras curiosidades para divertir al curioso y formar un arquitecto sabio, añadiendo que rematara su empeño con un tratado para conseguir aguas, nivelarlas y sacarlas con bombas y otros ingenios. |
Como podemos ver, entre sus intenciones no están sólo las de alimentar la curiosidad intelectual de sus lectores y divertir al curioso, sino también dar formación práctica que pudiera remediar el eterno problema del campo alcarreño, la extracción y conducción de aguas subterráneas que evitaran a los campesinos dependencia única y exclusiva de los caprichos meteorológicos. |
Con estas ideas Bartolomé Ferrer adelanta lo que años después será el empeño de las Sociedades Económicas de Amigos del País, la primera de las cuales la sociedad Vascongada de Amigos del País se fundó en 1.765 por el Marqués de Peña Florida que se había educado en Francia también con los jesuitas. |
Aunque el libro está concebido como un solo tomo, en realidad se trata de tres obras distintas. Tres cartillas que se suceden en una ordenación lógica, aritmética elemental, geometría elemental y arquitectura, cada una de ellas ofrece una singular apreciación desde el punto de vista de la didáctica aplicada a las matemáticas elementales que dan a su autor categoría propia para ocupar un puesto en la historia de la pedagogía conquense. |
Parece evidente que "El curioso arquitecto" se inspira en las ideas de la ilustración francesa cuando todavía eran niños los que más tarde redactarían La Enciclopedia, influencia que sólo puede explicarse por sus contactos con los Reales Estudios que se nutrían constantemente de profesores venidos de toda Europa principalmente Francia donde los jesuita no podían sustraerse a la influencia de los filósofos. Los ilustrados tienen una confianza absoluta en la ecuación, por eso quieren mejorarla, enriquecerla y modernizarla tanto en los aspectos cualitativos (aspectos científicosds) como en lo cuantitativo para llegar al mayor número posible de sujetos. |
La obra de Ferrer pretende romper un lanza a favor de las que denomina artes liberales "que plumas muy sobresalientes no tuvieron por empleo de menos monta escribir enseñando los cimientos matemáticos (cuya principal parte es la aritmética ) que ponerse en la cátedra a enseñar filosofía y comunicar al mundo sus doctos escritos en las más grandes materias" por ello "no es impropio de un sacerdote emplearse en esta noble y honesta ocupación, para divertir el ánimo en cosas de su ingenio y comunicar al común lo que pueda ser de alguna utilidad". |
Desde el punto de vista pedagógico la obra ofrece un amplio campo a la consideración de los teóricos de la educación, pero sobre todo nos presenta una meticulosa exposición metodológica de los temas que trata teniendo en cuenta que las enseñanzas deben favorecer la actitud y motivación del alumno hacia el aprendizaje (ser atractivas y divertir al alumno) y buscar la vertiente prácticas para la vida (ser de alguna utilidad). |
Entrando en el análisis de su obra hay que destaca rsu particular empeño por formarse y divulgar las matemáticas a las que considera fundamentales para el aprendizaje y ejercicio de las artes liberales. Ya hemos visto que asistió a clases de matemáticas con Kresa y Pettrey, lo que le proporcinó conocimientos en la materia, pero a la hora de elaborar su triple cartilla se siente necesitado de algo más que le permita hacer llegar a las clases humildes lo que en los Reales Estudios estaba reservado a los privilegiados. Para este propósito didáctico consultó con D. Antonio Palomino, pintor de cámara del Rey y autor de los grabados de la biografía de San Julián y con D. Theodoro Ardeman, también pintor de cámara y maestro de las obras reales, ambos muy doctos matemáticos. |
Aprovechó también a otros profesores de los Reales Estudios que no habiendo sido profesores suyos eran expertos matemáticos como D. José de Zaragoza y Vilanova, antecesor de Kresa en la cátedra y el Padre José Casisnbi, también catedrático de la misma materia. Por tanto cabe afirmar que las modestas cartillas de aritmética, geometría y arquitectura de Bartolomé Ferrer encierran la sabiduría científica y metodológica de las mas prestigiosas instituciones docentes de la época, los Reales Estudios y de los más acreditados maestros de la Corte. |
Para la cartilla de arquitectura además de las ideas y sugerencias de Palomino y Ardeman recurere a la historia de la arquitectura sirviéndose de las obras de Vitrubio (época de Augusto) y de los grandes maestros del renacimiento italiano y español. |
En conjunto las tres cartillas constituyen una guía didáctica sobre la aritmética, geometría y arquitectura en la que incluye consejos a los jóvenes que han de aprender, al maestro que ha de enseñar y al maestro de obras que debe asumir la parte práctica de las enseñanzas al mismo tiempo que expone, paso a paso, el método a seguir para la enseñanza de cada uno de los contenidos. Deja bien claro el autor que sus tres cartillas se ordenan de tal forma que los contenidos de cada una de ellas se apoye en la anterior, propósito que cumple estrictamente las más avanzadas exigencias didácticas. Su concepción didáctica y su exposición metodoloógica aparecen marcadamente teñidas de lo que hoy se considera progresismo pedagógico cuando afirma que "siguiendo la doctrina de los sabios, te he recogido en granos de oro este poco caudal, para que desde el crisol de la paciencia, con el fuego de la actividad y aplicación, descubras, veas y logres el metal rico de muy preciosos y subidos quilates". No cabe duda que tras estas tres bellas metáforas están implícitas las actuales teorías de "aprender a aprender" y del "aprendizaje por descubrimientos" que quizás no sean tan actuales ni tan progresistas como se pregonan. |
Marino Poves Jiménez |
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